Por Eduardo Rivas

La cuestión de la vacunación despertó sospechas desde el inicio en Zárate, ya sea, por ejemplo, por la vacunación VIP que tuvieron, entre otros, el intendente Osvaldo Cáffaro, su secretaria privada, Lilian Burroni, el empleado municipal Rodrigo Girard, el chofer del Intendente, Salvador de Bártoli, la esposa del chofer del Intendente, Cristina Bustos, el empleado de Zoonosis municipal, Álvaro Battista Palacios, y la empleada del Juzgado de Faltas 2. Esta última, cuya titular es hija de la secretaria privada del Intendente, Sonia Nores, inscriptos todos ellos fraudulentamente como trabajadores de salud.

También resaltamos la fraudulenta fecha de vacunación del Intendente Municipal, o la consignación de vacunados del municipio de Pellegrini cuando en realidad habían sido inoculados en el Club Pellegrini. Nada de lo que tuvo que ver con las vacunas en Zárate fue claro, hubo faltante de dosis, registros de falsas partidas y hasta hubo vacunas contra Covid-19 que se perdieron por un corte de luz en el Hospital Virgen del Carmen.

Como era de prever, la llegada de una tercera dosis como refuerzo no podía ser diferente. En Zárate se aplicaron hasta el momento 3619 vacunas de terceras dosis, mayoritariamente de AstraZéneca, pero curiosamente se aplicaron 217 dosis de Pfizer, 2 de Sputnik y 2 de Sinopharm, algo inentendible si, tal como se indica en la información oficial, cada frasco contiene 5 dosis. ¿Dónde están las que faltan? ¿Se tiraron? ¿No se registraron? Como siempre todo sospechoso.

Esta situación se repite si lo que se analizan son los lotes de las vacunas, puesto que son pocos los que la cantidad de dosis igualan los múltiplos de cinco o seis, que es la explicación que se dio del rendimiento de cada vial.

¿Qué ocurre con las vacunas en Zárate? ¿Se está vacunando gente por fuera de los registros oficiales? ¿Se destruyen dosis de vacunas no utilizadas? ¿Todavía no aprendieron a realizar los registros oficiales?

Es inentendible

Sospechoso también es que el Círculo Médico de Zárate, cuyo ex presidente es el actual secretario de Salud, Marcelo Schiavoni, haya enviado a sus asociados el siguiente mensaje: “Estimado profesional, solicitamos confirmación de los profesionales que tengan la voluntad de aplicarse la tercera dosis con Astrazeneca, la semana próxima en el Hospital Favaloro. Tienen tiempo para confirmar hasta el próximo viernes 3 de diciembre. Saludos cordiales. CMZ”.

¿Las terceras dosis no se aplican de acuerdo a los turnos asignados por la Provincia de Buenos Aires? ¿Cómo es que el Círculo Médico dispone de cupos, o vacunas, para sus asociados? ¿También tienen la misma posibilidad los restantes Colegios Profesionales de áreas relacionadas con la salud que fueron incluidos, de forma muy cuestionable, entre los profesionales de la salud y por ende privilegiados para la vacunación, aunque lo más cercano que hayan estado con el Covid-19 haya sido seguir las noticias por televisión?

Se miente con los casos positivos, se miente con los fallecidos, también se miente con la vacunación, ¿Por qué algo que debiera ser transparente a los ojos de los ciudadanos se vuelve tan turbio en manos de los funcionarios locales?

¿Por esto el Círculo Médico calla todas las cuestiones de salud que ocurren en Zárate? ¿Por qué tiene un trato privilegiado en determinadas cuestiones? Aunque no recibamos la vacuna, nos están vacunando.