El nombre de Hernán Casanova quizás no esté entre los más reconocidos en el ranking mundial del tenis, pero sin embargo, el jugador argentino dejó boquiabierto a medio mundo con una jugada que parece sacada de una película.

El tenista, que ocupa el puesto 389 del ranking ATP, jugaba el Challenger de Piracicaba, en Brasil, frente al italiano Gianluca Mager, cuando en un punto sumamente peleado, realizó un despliegue fenomenal de garra, velocidad, precisión y flexibilidad.

Tras un peloteo intenso, el italiano Mager logró descolocar a Hernán, quien se pasó de largo a la hora de recibir y derrapó hacia adelante, casi cayéndose, sobre el polvo de ladrillo. La pelota se iba larga por su costado izquierdo y el punto parecía cocinado.

Sin embargo, si algo caracteriza a Casanova es su tenacidad. Sorpresivamente, el tenista argentino se impulsó hacia atrás, cortando la inercia que llevaba al arrojar el peso de la parte superior de su cuerpo en dirección a suelo de la cancha, lo que le permitió volar cual arquero de fútbol y extender la raqueta lo suficiente como para alcanzar a golpear la bola.

Ese despliegue ya hubiera sido meritorio y destacado, pero lo mejor fue que el disparo fue un globo que superó al jugador italiano, quien se había acercado a la red esperando un envío que a duras penas llegar a cruzar la cancha. La pelota picó en el fondo de la cancha para sorpresa del público y el rival, quien no podía creer el punto que le acababan de hacer.

Mager pidió revisión, pero la decisión del árbitro convalido la increíble hazaña del argentino, y la jugada ya se perfile para ser destacada como el mejor punto del año.