El ex ministro de Planificación, Julio de Vido.
El sábado por la noche, apenas finalizó la definición de la Copa América entre Argentina y Brasil, miles de compatriotas se lanzaron a las calles para festejar el título, que se había demorado 28 años. Más allá de que las celebraciones se dieron en distintos puntos del país, como suele suceder, el epicentro fue en el Obelisco, en la ciudad de Buenos Aires. En ese contexto, Daniel Gollan apuntó que “no son las imágenes que nos gustan ver desde el punto de vista sanitario”, en alusión a la segunda ola de la pandemia de coronavirus. Y el ex funcionario kirchnerista Julio De Vido no lo perdonó: le pidió que, al “no entender” las “manifestaciones populares” hiciera “silenzio stampa”.
De Vido, quien cumple con su prisión domiciliaria en Zárate, lo cruzó por Twitter. “Ante algunas expresiones populares, que algunos parecen no entender, lo qué hay que hacer es "Silenzio de stampa", tal vez lo que pretende este funcionario es que le pidamos permiso para festejar un campeonato, a qué habrá jugado cuando era chico???”, escribió el ex ministro de Planificación.
Gollan había explicado que su preocupación no sólo radicaba en la cantidad de gente aglomerada, sino también en la falta de cumplimiento de otros protocolos más allá del distanciamiento social, como por ejemplo el uso de barbijos o tapabocas.