Más allá de haber vencido por penales a Racing y clasificado a la semifinal de la Copa de la Liga Profesional, Rosario Central no comenzó la semana con una sonrisa, sino con una gran complicación: es que el plantel sufrió una intoxicación masiva y encendió las alarmas a pocos días del cruce con River.

La prensa rosarina aseguró que alrededor de diez jugadores presentaron malestares estomacales, náuseas y diarrea en su regreso a la ciudad desde Salta. Los más afectados fueron Axel Werner, Carlos Quintana y Jorge Fatura Broun, el héroe de la definición desde los doce pasos.

Miguel Ángel Russo les dio descanso a todos los que padecen síntomas gastrointestinales y no los consideró para la práctica de este lunes. Durante todo el día serán monitoreados por el cuerpo médico del plantel y todo indica que el martes se reincorporarán al grupo y entrenarán a la par de sus compañeros.

El experimentado DT cruza los dedos para tener a disposición a todos sus soldados lo más rápido posible, ya que las semis con el Millonario están a la vuelta de la esquina. Aún no hay fecha confirmada por la organización, pero todo hace parecer que será el 8 o 9 de diciembre en Salta o Córdoba.