Claro está que, a veces, el fútbol puede ser injusto y cruel. Y prueba de ello es lo que sucedió en el estadio Monumental José Fierro, por la fecha 9 de la Copa de la Liga Profesional (Zona A). Atlético Tucumán, en el debut de Facundo Sava, dominó a Banfield durante la mayoría del partido e incluso tuvo muchas claras para marcar: tres travesaños, por ejemplo. Sin embargo, terminó cayendo por goleada, 3 a 0, y quedó en zona de descenso.

En el primer tiempo, el Decano fue ampliamente superior al Taladro. Tan así que tuvo las tres más claras y el equipo de Julio César Falcioni se salvó de milagro: a los 8' por el travesaño, a los 27' por Marcelo Barovero y a los 32' nuevamente por el travesaño. No se podía creer el 0-0 en el entretiempo.

Ya en el inicio del segundo tiempo, Barovero volvió a salvar a sus compañeros, con una atajada espectacular. Lo cierto es que tuvo una actuación heroica. Y cinco minutos después, cambió el encuentro, cuando Milton Giménez, de cabeza, adelantó a la visita, que no había pateado al arco. Fue un golpazo para el dueño de casa.

Agrandado, Banfield fue por más, y a los 20' Gerónimo Rivera decretó el 2 a 0. El pibe, promesa del club, después llegaría al doblete para que sea 3-0.

Atlético, si bien su rival se quedó con uno menos a los 24' (Franco Quinteros se fue bien expulsado por una dura entrada), no pudo reaccionar. Encima siguió teniendo mala suerte: a los 29' otro travesaño. Y así, tuvo un 2T para el olvido. En suma, mereció más, pero se terminó yendo goleado. Todavía no pudo ganar en este 2024.

Cabe destacar la contundencia de Banfield, que, tras zafar de milagro en reiteradas ocasiones, aprovechó muy bien las más claras que dispuso. El Taladro se encuentra en levantada desde su empate agónico en el clásico ante Lanús: dos triunfos seguidos lo dejan noveno en la Zona A, decimoséptimo en la tabla anual y veinteavo en los promedios.