"Son todos lo mismo", sentencian muchos argentinos como una frase ya hecha. Lo cual puede vislumbrarse al momento de hacer una vista gorda en el Municipio de General Pueyrredón (MGP) gobernado por Guillermo Montenegro, quién tendría en su Gabinete a personajes de lazos muy estrechos con el Frente de Todos (FdT).

En este caso, se manifiesta el nombre de Carlos Aguer, un viejo conocido del peronismo en Propuesta Republicana (PRO), actualmente militante del espacio de Miguel Ángel Pichetto. Sin embargo, como todo "justicialista", es demasiado abierto a la hora de relacionarse con "compañeros".

Aguer ha sido visto muy de "amigo" y militante con el director de Correo Argentino, Rodolfo "Manino" Iriart, hombre del sciolismo. Lo cual muy pocos saben, pero desde los círculos del peronismo saben bien que trabajan muy juntos los dos.

Por otro lado, poco le importa al intendente marplatense, y mucho menos al mismo Aguer, ser director de Asuntos de la Comunidad (dentro de la Secretaría de Desarrollo Social) en la Comuna amarilla. Hasta se lo ha podido encontrar en algún que otro acto, participando de las internas del Partido Justicialista (PJ) para que ganara el ala albertista.

El "Lado B" de su función

Carlos Aguer no es solo un directivo más, ya que trabaja específicamente para Marcelo Sosa en la misma área. Toda supervisada por completo desde la Subsecretaría de Inspección General que comanda el mismísimo Marcelo Cardoso. "No anda para adelante ni para atrás", sentenciaron fuentes oficiales a este medio.

Supuestamente, Aguer tendría muy malos tratos en el interior de sus funciones junto a otro funcionario municipal como Sebastián Garro. Ambos amenazarían a pequeños empresarios, como también a otros colegas comunales. Todo ello debido a la modalidad laboral típica de ellos mismos.

Una de las tantas denuncias que pudo tomar este portal, resulta de la contratación de unos servicios para la reparación de paradores en la ciudad de Mar del Plata, por parte de Aguer. Este utilizó su título de arquitecto para poder manipular sus funciones como municipal.

Ahora bien, en una de las charlas por WhatsApp que tuvo acceso Buenos Aires Ahora, se puede señalar el reclamo de una falta de pago por 600 mil pesos. Lo cual no fue depositado y hasta habría sido "retrucado" con cierta amenaza.

Ante todo lo referido, es propicio dejar en claro que Aguer y su gente buscan, de cara al 2023, poner "los huevos en todos los canastos" para poder mantenerse de pie. Amén de ir "amenanzando a cualquiera", creyendo que la política ofrece demasiada impunidad.