Todavía con Marcelo Gallardo en el banco, debido a que no pudo resolver su salida con los jeques, Al-Ittihad se despachó con una gran goleada 4-1 sobre Damac que le permitió romper una mala racha en Arabia Saudita y seguir ilusionándose con la clasificación al menos a una copa.

El Muñeco, que tuvo un irregular desempeño esta temporada y no seguiría dirigiendo al plantel después de junio, debió ingeniárselas para armar un equipo sin sus máximas figuras, como Karim Benzema, Abderrazak Hamdallah, Fabinho, Luiz Felipe y Romarinho, todos lesionados.

De todos modos, sus dirigidos pudieron sacar adelante el encuentro como local y terminaron festejando gracias a los goles de Jota antes del cierre del primer tiempo y de Talal Hbaji, Marwan Al-Sahafi y Farhah Ali Saeed Al Qahtah Al Shamrani. La historia pudo haber terminado con la paliza 4-0, pero la visita descontó ya en tiempo de descuento de la mano de Farouk Chafai.

Con este triunfo, el Al-Ittihad de Gallardo pudo dejar atrás una sequía de cinco presentaciones sin triunfos. En todo ese tiempo, quedó eliminado de la Copa del Rey de Campeones frente a Al-Hilal, sufrió un aplastante 5-0 por parte de Al-Ettifaq y también dejó tres puntos contra Abha, que se encontraba en zona de descenso.

Si bien ya no tiene chances de clasificarse a la Champions League asiática, el conjunto aurinegro aún no pierde la fe de meterse al segundo certamen más importante del continente. Para eso deberá ganarle el próximo lunes al Al-Nassr de Cristiano Ronaldo (en el que será el último partido del Muñeco) y esperar que Al Taawoun –tercero en la liga- pierda en la última jornada.

Tras la victoria, al entrenador le tocó contestar si este fue su último partido al frente del equipo, para dejar en claro que ello no depende de él. "Tienen que buscar las respuestas en otro lado, no aquí. ¿Las respuestas saben dónde están? Las respuestas están en otro lado. Vayan a buscar las respuestas donde las tienen que buscar", lanzó con una sonrisa irónica traductor mediante.